ANTONIO MACHADO NUÑEZ


D. Antonio Machado y Núñez
Dr. en Medicina y Cirugía, Dr. en Ciencias Naturales,
Dr. en Minerología, Matemático, Zoólogo, Catedrático y
Político Republicano
★Cádiz, 30 de Marzo de 1815 
★Madrid, 24 de Julio de 1896
Cuartel 2 - Manzana 22 - Letra B

Sepultura de Antonio Machado Núñez. -Cementerio Civil- Foto: ©Javier Jara
Una vida dilatada dedicada apasionadamente a la ciencia y la virtud; un alma bondadosa y pura; una asombrosa firmeza en sus convicciones, desafiando los vientos cambiantes de su época; una devoción inquebrantable a las ideas republicanas y al librepensamiento. Todo esto, entrelazado con la ejemplaridad de un hogar iluminado durante muchos años por la chispa de la felicidad, otorgan al venerable genio, Don Antonio Machado y Núñez, un lugar especial en el corazón, de respeto, cariño, admiración y de eterno recuerdo.
D. Antonio Machado y Núñez
Fuente: Antonio Machado. Laberinto de espejos, Sevilla, Consejería de Cultura

La larga estela de Antonio Machado:
Un viaje entre ciencia y virtud
~ #necrológicasdelcivil ~
Javier Jara

Machado nació en la ciudad de Cádiz un jueves 30 de marzo de 1815, siendo hijo de Francisco Machado Rodríguez, natural de Cádiz y próspero comerciante, y María Rodríguez Núñez, originaria de Alonso, provincia de Huelva.
Según consta en el libro de bautismos de la Catedral de Cádiz, Machado fue bautizado el 2 de abril de ese mismo año, llevando el nombre de Antonio Ramón.

En este rincón costero, Antonio se sumergió en los estudios con notable provecho. Inició su andar académico en el convento de los Dominicos, donde las primeras páginas de la sabiduría se abrieron ante él, y posteriormente, en el seminario conciliar de San Bartolomé, continuó su incansable búsqueda de conocimiento, graduándose de Bachiller en el estudio de las Humanidades y Filosofía.

El joven Machado ingresó en el Colegio de Medicina y Cirugía de la ciudad gaditana, dependiente del Ministerio de Marina, donde se licenció en ambas disciplinas en 1837, obteniendo el doctorado en ellas un año después. Durante sus estudios, brindó su servicio en el Hospital Militar durante la epidemia de cólera, lo que le valió el reconocimiento y gratitud de su majestad Fernando VII.

Tras el cierre de sus estudios, emprendió un viaje que lo llevó a Guatemala, hogar de su hermano Manuel, y luego a San Salvador y Cuba. En el retorno a Europa en 1842, se arraigó en París, donde las páginas de la universidad de la Sorbona tejieron nuevos capítulos en su búsqueda de conocimiento.  Un año después regresó a Cádiz donde fue nombrado Catedrático de la facultad de ciencias médicas.

En 1845, a la edad de veintinueve años, Antonio Machado contrajo matrimonio con Cipriana Álvarez Durán, quien contaba con diecisiete años y era originaria de Sevilla. 
Permítame, querido lector, abrir un pequeño paréntesis para conocer la figura de Cipriana:

D.ª Cipriana Álvarez Durán
Fuente: Antonio Machado. Laberinto de espejos, Sevilla, Consejería de Cultura
Cipriana Álvarez Durán  era hija de Cipriana Durán, oriunda de Madrid, y de José Álvarez Guerra, hacendado natural de Zafra, provincia de Extremadura, conocido por su obra "Unidad simbólica y destino del hombre en la tierra o filosofía de la razón". Este trabajo anticipaba tesis krausistas, doctrina que sería impulsada años después por Julián Sanz del Río (ver necrológica). También fue el primer gobernador civil de Cáceres y posteriormente de Soria.

Cipriana, influenciada por su tío Agustín Durán, ilustre autor del Romancero general y defensor del teatro español del Siglo de Oro, se convirtió en una exponente destacada del folklore. Conocida como "la mujer de los cuentos" en Llerena, provincia de Badajoz, se erigió como una apasionada recopiladora de cuentos, chascarrillos, trabalenguas, coplas y tradiciones populares que nutrieron su reputación como folklorista. Este título, merecido y cálido, se forjó en la esencia de su trabajo enraizado en la rica herencia cultural de la región.
Antonio Machado Álvarez
«DEMÓFILO»
Su legado trascendió con la publicación de cinco cuentos en el año 1884 en "El Folklore Andaluz", y su inclinación por las artes plásticas añadió un matiz creativo a su polifacética personalidad.
Su vida, como un relato lleno de matices, se entrelazó con las historias que recopiló y compartió con el mundo, dejando una marca duradera en la memoria de aquellos que valoran la riqueza de las tradiciones populares. Además, como buena esposa de Machado y dedicada madre, contribuyó a tejer el tejido de su hogar con la misma pasión con la que preservaba las historias y costumbres de su entorno.

Fruto de este matrimonio nació un único hijo, Antonio Machado y Álvarez «Demófilo»¹ quien se destacó como abogado, filósofo, escritor y folklorista «Padre de la Flamencología moderna». Nació el 4 de abril de 1857 en Santiago de Compostela y falleció en Sevilla a la edad de cuarenta y seis años, el 4 de febrero de 1893, a causa de una esclerosis medular. Este, a su vez, fue padre de los reconocidos poetas Antonio y Manuel Machado.
¹ No confundir con Fernando Lozano Montes «Demófilo» propietario y fundador de Las Dominicales del Libre Pensamiento, también enterrado en el Cementerio Civil. (Ver necrológica).

Manuel y Antonio Machado al término de la función de gala de La Lola se va a los puertos, en el Teatro Fontalba de Madrid en 1929.
Fuente: Fundación Española Antonio Machado
Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes

En el hogar familiar de la calle Fuencarral número 148, en Madrid, Cipriana Álvarez y Durán suspiró su último aliento a las diecisiete treinta horas del 8 de agosto de 1904.
Conforme a su profundo deseo, encontró su morada eterna en la añeja tierra del cuartel 14, manzana 95, letra B, de la necrópolis del Este de Madrid, —popularmente cementerio de la Almudena—. Allí, en la zona católica, fue enterrada junto a su joven nieta, Cipriana Machado y Ruiz, fallecida hacía ya cuatro años, a los 14 años de edad, al otro lado de la Avenida que separa su eternidad de la de su esposo, eternamente arraigado en tierra civil.
Más tarde, descansaron junto a ella, en su misma sepultura, su también nieto Francisco Machado y Ruiz y su esposa Mercedes Martínez López.

Sepultura de Cipriana Álvarez Durán, Viuda de Antonio Machado Nuñez. Necrópolis del Este de Madrid —cementerio de la Almudena—
y sus nietos Cipriana y Francisco Machado Ruiz y la esposa de este, Mercedes Martínez López.

Fotografía: JavierJara

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